No es una opción que pueda contemplar por muy malo que sea el espectáculo ofrecido, porque nunca he renovado por el espectáculo, ni por el buen fútbol, ni por la propuesta más o menos atrevida de un entrenador u otro, ni por si renuevan o fichan a determinado jugador, ni por los resultados deportivos, ni por la gestión más o menos acertada de la directiva de turno.
Ni tan siquiera me he planteado renovar en función de si podré asistir o no por los horarios, simplemente renovaré porque considero que este club, sin sus socios de siempre, morirá.
Es la única cosa que no se puede permitir este club. Para todo lo demás, estamos curtidos y diseñados para sobrevivir, pero para que su socio le dé la espalda, con la presión social y ataques externos que sufre esta entidad, no hay solución. Sin los socios, el club muere. Sin más.
Obviamente, esto nos significa que se firme un cheque en blanco y que si hay gente que se decide a no renovar por cualquiera de estos motivos, o porque simplemente está cansada, no sea algo totalmente entendible.
Es precisamente por esto, que el club debería tener un tacto y un cuidado sumamente especial. Es un tema muy delicado, y con la única cosa que no se puede jugar.
Es por ello que deberían intentar poner toda la maquinaria en marcha para intentar conseguir motivar al socio que está indeciso, que de un paso al frente y se decida a renovar. Cualquier tipo de especulación en este tema puede tener resultados trágicos, porque cada socio que se pueda perder, será difícilmente recuperable.
Decisiones como la de subir precios, tras la temporada vivida o, mejor dicho: sufrida, solo servirán para conseguir que algunos no renueven y para los que lo hagamos, nos encontremos un poco más desamparados ante esta forma noble y poética de invertir el dinero.
Todo tiene su momento, y su tempo (como en la ópera), y quizás este no sea el mejor de nuestra centenaria historia para decidir incrementar el precio de los abonos. Ya habrá tiempo de subirlos y que el socio lo admita con mejor agrado. Ahora sería, simplemente, una temeridad.
Como dice el libro "El arte de la guerra" de Sun Tzu, "un buen guerrero debe saber cuando debe luchar y cuando no".
Espero y deseo que a quién corresponda la decisión, reflexione al respecto
José Antonio Meca
01/10/2015 | Nosotros o nadie |
25/08/2015 | La colla de fatxes replegats |
03/08/2015 | No saquen conclusiones |
29/06/2015 | Lucas y Sergio |
03/06/2015 | La entrevista a Gol TV de Abraham |
13/05/2015 | Perarnau renovación |
28/04/2015 | El traje nuevo del emperador |
07/04/2015 | Si no puedes ir a Europa, al menos no sufras |
27/12/2014 | ¿Falete selección? |
04/12/2014 | Col·lectiu Roger de Llúria |